Los pueblos originarios son sujetos históricos en el actual proceso de transformación de la vida pública nacional y local, ya que son la raíz y el origen de la patria. En ese sentido, el Gobierno del Estado reconoce a los pueblos indígenas como sujetos de derecho con capacidad para decidir libremente sus formas de organización, así como su desarrollo económico, social y cultural.

Los pueblos indígenas aportan una historia de resistencia, así como valores culturales y principios comunitarios. En este marco de relación entre el Estado y dichos pueblos, el trato se basa en el respeto de sus derechos colectivos. Para lograrlo, es importante reconocer el carácter pluricultural de la nación mexicana y del estado poblano, respetar el derecho de libre determinación de nuestros pueblos y comunidades, fomentar el desarrollo sostenible a partir del diálogo y el común acuerdo, promover el derecho a la consulta y la orientación y finalmente garantizar la participación de las mujeres indígenas en todo el proceso de toma de decisiones. Por ello, será sustancial trabajar en políticas, programas y acciones que reconozcan plenamente los derechos de pueblos y comunidades, trasladarlos a la práctica y darle voz a nuestros antepasados, quienes han sido participes y actores primordiales en la independencia, en la reforma, en la revolución, en la actualidad.

La Secretaría de Trabajo, como rectora del ámbito laboral, busca generar espacios en las localidades para ofrecer a este sector en situación de vulnerabilidad, herramientas e información que faciliten su inclusión a la vida productiva y laboral. Al mismo tiempo, se da a la tarea de impulsar proyectos generados en las treinta y dos regiones del estado, priorizando a la población con barreras para acceder a un trabajo, otorgando capacitaciones y apoyo para la realización de su proyecto productivo, forma de autoempleo o sociedad cooperativa.