El derecho individual del trabajo es un conjunto de normas creadas para regular las relaciones entre personas empleadoras y personas trabajadoras. Estos derechos se establecen con la finalidad de garantizar la paz social y la creación, subsistencia y preservación de empleos decentes.
Asimismo, a través de la normatividad en materia laboral, se exponen las herramientas de las que las y los trabajadores pueden echar mano en el plano jurídico, y se establecen las modalidades, las fuentes formales y condiciones del trabajo, su naturaleza y fines; los sujetos o personas que conforman el vínculo laboral, entre otros aspectos relevantes en lo contractual.
Estos elementos son claves como principios de la estabilidad en el trabajo; dan pauta a aspectos a considerar como las condiciones generales en las que se ejercen las labores de las y los trabajadores, los contratos y remuneraciones, los tipos de salarios, las jornadas de trabajo, los días de descanso, las vacaciones, la prima de vacaciones, las obligaciones de los sujetos, los riesgos de trabajo y sus consecuencias jurídicas, las causas de suspensión, rescisión y terminación de las relaciones de trabajo, la naturaleza de los trabajos especiales, el trabajo de los menores y de las mujeres, las figuras procesales respecto a la prescripción y la caducidad, entre otros.